miércoles, 30 de mayo de 2007

Fiestas Mayas 2

Llegaron las primeras fotos de las Fiestas Mayas.
Espero que las disfruten tanto como yo disfruté de la fiesta.


Agradezco de todo corazón a todos los asistentes y los invito a leer la entrada "Fiestas Mayas" más abajo.

Mientras tanto, seguiremos esperando que el candidato Walsi nos envíe las fotos que sacó con su super cámara digital, que seguramente, serán mejores que éstas.

(podés verlas en http://picasaweb.google.com/mirifer72/FiestasMayas o en el albúm de Fiestas Mayas en "Fotos pasadas por Agua" a la derecha)

martes, 29 de mayo de 2007

Faltan 23 días?

Solo faltan 23 días ¿? para el Campeonato Nacional de Natación Master y seguimos sin recibir una convocatoria oficial.
Uno puede imaginarse que en algún momento de los siguientes veinte días, nos vamos a enterar cuáles son las pruebas que nos va a tocar y como no somos ni Bardach ni Meolans, no nos jugamos la clasificación para ningún evento mundial, ni estamos por batir ningún record sudamericano, da igual el tipo de preparación que hagamos antes del Master (a pesar que nuestro entrenador crea que algo de lo dicho anteriormente fuera posible y proteste todos los días por la falta de seriedad).
Pero la mayoría, por no decir todos los nadadores masters, tenemos responsabilidades (trabajo, familia, estudios, etc) y no es sencillo poder acomodar todas las fichas para poder participar de un torneo que, además, se disputa en otra provincia y eso implica organizar traslados y conseguir un lugar donde dormir. No se puede reservar un hotel, ni un servicio de transporte, si uno no tiene la seguridad de la realización del evento (a nadie le sobra la plata como para arriesgarse y no tenemos sponsors que puedan absorber los gastos) , y hasta ahora lo único que tenemos son un par de mails del presidente de la Comisión Nacional de Masters de la CADDA publicados en blogs de natación:
¿No es un poco desprolijo?
Por un lado tengo muchas ganas de participar, de competir, de hinchar por mi equipo (Aguante Marea Roja), de alentar a cada uno de mis compañeros, de participar en un evento que reune a mucha gente que disfruta del contacto con el agua y de la adrenalina de las competencias. Pero por otro lado, siento que todas estas demoras en la organización lo único que me generan es fastidio, frustración e impotencia...

lunes, 28 de mayo de 2007

Ninguna palabra...

..."No sé cuánto tiempo permanecí sentado en la vía, contemplando el púrpura desaparecer del cielo tan en silencio como lo hiciera por la tarde. De todos modos el suficiente para que mi trasero empezara a resentirse. Iba a incorporarme, cuando miré hacia la derecha y, a no más de diez metros de distancia, vi una cervatilla en el firme de las vías.
El corazón me dio un vuelco con tal fuerza que creí que iba a salírseme por la boca. Sentí una gran excitación en estómago y genitales. No me moví. No podría haberlo hecho aunque hubiera querido. Los ojos de la cervatilla no eran pardos, sino de un negro intenso como el terciopelo que usan en las joyerías para exponerlas joyas. Sus orejitas eran ante arañado. Me miraba con serenidad, con la cabeza levemente inclinada en lo que tomé por curiosidad, al ver a un chico con el pelo enmarañado, con pantalones con vueltas y camisa caqui con los codos remendados y el cuello subido al estilo de la época. Lo que yo estaba viendo era una especie de regalo, algo que se me ofrecía con una despreocupación realmente pasmosa.
Nos quedamos largo rato mirándonos... creo. Luego, la cierva se volvió y se alejó hasta el otro lado de las vías, moviendo despreocupadamente su rabo corto y blanco. Encontró hierba y se puso a pacer. No podía creerlo. Se había puesto a pacer. No se volvió a mirarme; ni necesitaba hacerlo; yo estaba petrificado."

[...]

"Quería decirle algo más a Chris, pero no sabía cómo hacerlo.
- Bueno, amigo, chócala -dijo, en tono cansado.
- Chris...
- Chócala.
Lo hice.
- Te veré.
Sonrió... aquella sonrisa suya tierna y luminosa.
- No si yo te veo primero, cara tonto.
Se alejó, riéndose todavía, moviéndose ágil y airosamente, como si estuviera reventado como yo ni tuviera ampollas como yo, y picaduras y mordeduras de mosquitos y ninguas y jejenes, como yo. Como si no tuviera preocupación de ningún tipo, como si se encaminara a un lugar realmente importante en vez de simplemente a una casa (correspondería más a la verdad decir choza) de tres habitaciones, sin instalaciones sanitarias y con los cristales rotos cubiertos con plástico y con un hermano que seguramente le estaba esperando escondido en el porche de delante. Aunque yo hubiera sabido decir lo correcto seguramente no habría podido decirlo. Las palabras destruyen las funciones del amor (supongo que es terrible que un escritor diga esto, pero creo que es cierto). Si hablas para decirle a una cierva que no le deseas ningún daño, se esfumará con un simple meneo del rabo. Lo malo es la palabra. El amor no es lo que los poetas cretinos como McKuen quieren hacerte creer. El amor tiene dientes que muerden; y las heridas jamás cicatrizan. Ninguna palabra, ninguna combinación de palabras puede curar esas mordeduras del amor. Pero también lo contrario es cierto, ésa es la ironía. Si esas heridas cierran, las palabras se mueren con ellas. Podéis creerme. Me gano la vida con las palabras y sé que es cierto."

[...]

"Las cosas más importantes son siempre las más difíciles de contar. Son cosas de las que uno se avergüenza, porque las palabras las degradan. Al formular de manera verbal algo que mentalmente nos parecía ilimitado, lo reducimos a tamaño natural. Claro que eso no es todo, ¿verdad? Todo aquello que consideramos más importante está siempre demasiado cerca de nuestros sentimientos y deseos más recónditos, como marcas hacia un tesoro que los enemigos ansiaran robarnos. Y a veces hacemos revelaciones de este tipo y nos encontramos sólo con la mirada extrañada de la gente que no entiende en absoluto lo que hemos contado, ni por qué nos puede parecer tan importante como para que casi se nos quiebre la voz al contarlo. Creo que eso es precisamente lo peor. Que el secreto lo siga siendo, no por falta de un narrador, sino por falta de un oyente comprensivo."


Stephen King,

"El Cuerpo"

(Publicado en

"Las 4 Estaciones" -

"El Otoño de la Inocencia")

Fragmentos del cuento que la mayoría conoce por la película "Cuenta Conmigo".

Fiestas Mayas

El viernes 25, en mi humilde morada, tuvieron lugar las Fiestas Mayas.
Como alguno de los que asistieron (por no decir, la mayoría) suponía que esto tenía que ver con algún tipo de celebración de una cultura precolombina, o con un error ortográfico respecto de la indumentaria que usamos para entrenar, aclaro que las "Fiestas Mayas" fueron instituidas por la Asamblea de 1813 y comprendían una serie de celebraciones y juegos que se desarrollaban del 23 al 26 de mayo en el centro de la actual Plaza de Mayo, para conmemorar la Revolución (25 de mayo de 1810).
Las Fiestas Mayas de este viernes fueron también una revolución... Si 30 personas en tres ambientes no revolucionan algo sería aburridísimo (quizás lo fue para algunos, si fue así, "lola"mento)
No hubo ni tiempo ni presupuesto para el Locro, pero como bien argentinos (bien incoherentes), disfrutamos unas Pizzas de Chicago "impresionantes". Nunca imaginé que en la ecuación 5 pizzas para 30 personas, el resultado sería 1,5 pizzas de resto: Imagínense lo que eran esas pizzas (Gracias Mark!).
Las celebraciones tenían como motivo principal, una "xuntanza" para despedir (o decir hasta luego) a unos amigos que se van.
Por un lado, Juan Manuel y Mabel, que se van a laburar a Madrid por unos meses. Se van con nervios, con ansiedad, (en palabras textuales de Juan Manuel: "cagados en las patas"). Pero como se van a hacer lo que saben, no hay dudas de que van a tener éxito (como dijo alguien: deseo éxitos, la suerte es para los mediocres).
Por otro lado, Steve y Mark, unos amigos importados de Estados Unidos que nos acompañaron durante más de un año con su cariño, su dulzura, su fraternidad, su respeto y todas las cosas lindas que se les puedan ocurrir (además de los brownies, los sconnes de arándanos, las pizzas de Chicago, las cervezas, etc. etc.). Son esa clase de gente que aprendés a querer desde el primer día y que sin saber cómo ni por qué, se te meten en el corazón, y pasan a formar parte de tu vida para siempre. Agradezco a la vida el haberlos podido conocer (y le agradecería mucho más si algún día los puedo ir a visitar a Chicago :P)
Estas fiestas también eran para celebrar que tengo amigos maravillosos, a los que, por timidez, por evitar el cholulismo, o para no espantarlos (ver cita de "El Cuerpo" de Stephen King, en "Ninguna palabra...") no puedo decirles "Te quiero" todo el tiempo, pero intento demostrárselos. Y además, para celebrar que siempre, después de tocar fondo, no queda otra que salir a flote... Hubo veces que salí a flote a los manotazos y pataleando con furia, y lo único que logré fue agotarme y gastar tanta energía, que no había resto para sentirme viva... En cambio, esta vez, salí a flote "haciendo la plancha" y esto me permite disfrutar del contacto con el agua, convivir de manera armoniosa con la "fauna marina" que me rodea (y esos son Ustedes - perdón por lo de fauna) y avanzar hacia donde me lleve la corriente y el destino. Y por eso me merecía un gran festejo!
Dejando las metáforas para el diván, siempre dije que una imagen vale más que mil palabras; pero el problema es que si las imágenes son sacadas con una cámara fotográfica (no digital), se necesitan 24 horas para revelar el rollo y otras tantas para escanearlas. Así que las fotos se las debo por un par de días...

jueves, 24 de mayo de 2007

El agua de la Vida Parte V

El Secreto del Abismo...

The Abyss ("El secreto del abismo") es el nombre de una película que debo haber visto más de 10 veces. La dirigió James Cameron en 1989 y la protagonizó Ed Harris ('Bud'). No voy a entrar en detalles sobre la película, pero voy a recordar una escena, cuando Bud llega al fondo del abismo y se da cuenta que, aunque consiguió lo que buscaba, ya no le queda aire (en realidad es más que eso) para volver... En ese momento, miles de metros lo separan de la superficie y la fuerza de miles de gravedades lo aplastan contra el fondo del abismo. Llega el punto donde comienza el último sueño, ese sueño del que ya no se despierta, como en "el claro al final de la senda" de Roland (Stephen King), o como el "confortablemente adormecido" de Roger Waters...
Hubo una época en mi vida, donde me sentí así.
Y justamente fue en esa época, en la que estuve alejada del agua.
Al contrario de lo que le sucedía a Bud (el protagonista de la película) a mí me sobraba aire para respirar, pero igualmente me sentía ahogada...
Hubo un período en que me pareció ver una pequeña luz (tiene que ver con el final de la película y no se los pienso contar - mírenla que vale la pena) y entonces me anoté para hacer el profesorado de Natación.
Como conté en la parte IV, el haber trabajado como "seño" de natación a los 17 años, fue lo más placentero que experimenté en mi vida laboral, y creí que si hacía el curso, iba a poder dedicarme a enseñar Natación y dejar de una vez y para siempre la oficina...
Me equivoqué... estoy en la oficina mientras escribo esto...
En realidad me equivoqué en la elección del lugar donde realizarlo y el error tuvo que ver con el desconocimiento (porque no sabía que otorgaba un título no oficial), con la falta de tiempo (trabajaba 9 horas y cursaba de 4 a 6 horas en la facultad y este curso solo demandaba ir los sábados) y con la urgencia (necesitaba imperiosamente volver a conectarme con el agua).
Durante el primer año, que me otorgó el título de Instructora de Natación, tuve como profesor de la parte práctica a un chico divino que se llamaba Daniel o Javier (no lo recuerdo) y que me enseñó la nueva técnica de pecho (había cambiado mucho la forma de nadar este estilo) y me corrigió bastante la técnica de espalda y también me enseñó a nadar "estilo over" que yo ni siquiera sabía que existía.
El problema era que en el curso se habían anotado varias personas que no sabían nadar (los únicos requisitos para el curso eran saber flotar y tener los estudios primarios aprobados ¿?) y el profe se tenía que concentrar en ellos.
Durante el segundo año, y con una profesora (porque el profe anterior, intentando defender los intereses de sus alumnos, se peleó con los directores del Instituto y renunció) aprendimos ejercicios de técnica para los 4 estilos, técnicas de rescate y algunos ejercicios de entrada en calor...
Aprobé la parte práctica y la parte teórica de pileta sin problemas, pero decepcionada por la falta de calidad del curso, nunca rendí el examen final teórico y por ende, nunca retiré el título de Profesora de Natación (el de Instructora está tirado detrás de una biblioteca...)
Pero más allá de toda la crítica y todo lo negativo, este curso me dio "aire (en realidad es más que eso) para volver..." para volver a sentir el agua, para volver a creer que podía hacer algo distinto, para volver a despertar del sueño eterno de la rutina, al menos por un par de meses...
Además, me enseñó (sobre todo mi profe de 1º año) que, aunque sabía nadar muy bien, no me las sabía todas y que, siempre, en cualquier aspecto o momento de la vida, hay algo nuevo por aprender...
*"El secreto del Abismo" suelen pasarla por Canal Fox, si la alquilan busquen la versión extendida, que es posterior a la original (1993).

miércoles, 23 de mayo de 2007

La Sirena Varada

Y me he enredado
siempre entre algas,
Maraña contra los dedos.
Cierras la madeja
con el fastidio del destino,
Y el mordisco lo dan otros;
Encías ensangrentadas,
miradas de criminales,
A grandes rasgos, podrías ser tú.

Echar el ancla a babor
Y de un extremo la argolla
Y del otro tu corazón.
Mientras tanto, te sangra.

Y el mendigo siempre a tu lado,
Tu compañero de viaje.
Cuando las estrellas se apaguen,
Tarde o temprano, también vendrás tú.

Duerme un poco más,
Los párpados no aguantan ya,
Luego están las decepciones
Cuando el cierzo* no parece perdonar.

Sirena, vuelve al mar,
Varada por la realidad.
Sufrir alucinaciones
Cuando el cielo no parece escuchar...

Dedicarte un sueño,
Cerrar los ojos y sentir

oscuridad inmensa,
Entregado a una luz,
Como un laberinto de incertidumbre.
Esquivas la pesadilla.
Y sobrevolar el cansancio
Y en un instante, en tierra otra vez.

El miedo a traspasar la frontera
de los nombres, como un extraño.
Dibuja la espiral de la derrota
Y oscurece tantos halagos,
Sol, en la memoria que se va...

Y duerme un poco más,
Los párpados no aguantan ya,
Luego están las decepciones
Cuando el cierzo no parece perdonar.

Sirena, vuelve al mar,
Varada por la realidad.
Sufrir alucinaciones
Cuando el cielo no parece escuchar.

Héroes del Silencio (1993 - La Sirena Varada / El espíritu del Vino)

*cierzo: viento fuerte, muy frío y seco.

lunes, 21 de mayo de 2007

Faltan 31 días

Solo faltan 31 días para el Campeonato Nacional de Natación Masters y la pregunta del millón es:
¿cuándo estará la convocatoria oficial y el programa de pruebas?
Capaz que están implementando una nueva modalidad para encontrar a los Nadadores Masters más completos del país. Esta modalidad, basada en los estudios del Dr. Pablo Alvarez sobre "Entrenamientos MR: Concentración y Atención", implicaría que el contenido de la prueba sería dictado por micrófono instantes antes del momento de la partida y luego que los nadadores estuvieran preparados "a sus marcas". La única excepción a esta regla serían las pruebas de espalda, donde avisarían antes para permitir la partida desde el agua...
De esta forma uno llegaría al momento de la inscripción y elegiría, al mejor estilo Loto, 6 números al azar, según los cuáles se le asignarían las pruebas...
Creo que con esta modalidad, yo saldría favorecida, porque sería una forma de tener, al menos una probabilidad, de nadar una prueba de 50 mts.
Estoy nominada...

Claro como el agua...

El sábado a las 17 hs llegué al Natatorio Janet Campbell del CENARD para presenciar la tercera jornada del Campeonato Nacional de Mayores de Natación 2007.
No imaginé que habría tantos nadadores y una de las primeras sensaciones fue pensar en el anonimato de la mayoría de los que estaban ablandando.
Las miradas del público (que era muy poco) solo se posaban en José y en Georgina, mientras unos ochenta nadadores más se paseaban alrededor...
Después de haber presenciado los Odesur, en donde dejábamos la garganta alentando a los nadadores Argentinos, la falta de entusiasmo del público fue un bajón.
Otro bajón es estar a metros de una pileta y no poder meterse. Con Andrés nos reíamos pensando en hacer una demostración de Nadadores Masters, pero consideramos que los efectos que nuestra imagen dejaría en los nadadores sería muy poco motivadora.
En fin, comenzaron las pruebas y siempre es un placer ver a los mejores nadadores del país dejando lo mejor de sí en el agua. Lástima que con el pésimo sistema de audio entendíamos muy poco los nombres de los competidores...
Disfrutamos y sufrimos en los apenas 23 segundos de los 50 libre donde Melconian casi le gana al Pepe. Lo que resulta una desilusión es el tablero electrónico (que de electrónico tiene muy poco); es tan poco claro, que saber quién ganó se convierte en una especie de "dónde está Wally" sin Wally (imposible de resolver)
Y otro momento que sufrimos fue cuando se disputaban los 1500 metros y se cortó la luz. Los nadadores llevaban 1100 metros nadados y de golpe todo se convierte en oscuridad. Las luces de los celulares y de algunas cámaras permitían ver cómo, en penumbras, algunos de los chicos seguían nadando. Los entrenadores, los jueces y las autoridades del evento se movían de un lado a otro en el borde sin saber qué había que hacer, hasta que alguien se dio cuenta que el nadador que iba primero ya había hecho 200 metros más desde el corte de luz y bajaron la soga de partida en falso para pararlo.
Resulta lamentable que esos ocho nadadores hayan puesto lo mejor de sí para nada, porque la prueba no tenía validez, pero lo más lamentable es que pidieran a los entrenadores y nadadores que se acercaran a la mesa para "tener una conversación".
Finalmente se continuó con el evento, se volvió a cortar la luz (por suerte no había nadie en el agua), terminaron anunciando las pruebas una tras otra para terminar rápido y evitar que volviera a fallar la iluminación...
Lo que me resulta más triste es, por un lado, que todo esto sucedió en el CENARD Centro de Alto Rendimiento Deportivo, es decir, el lugar que el Estado pone a disposición de los Deportistas de Mejor nivel que representan al país en el plano internacional y que está lleno de falencias y carencias; y por otro lado, que estas cosas sucedan y que el único rastro que dejen sea el cansancio de quienes las padecen. Me da la sensación que estos problemas solo tienen el valor de anécdotas y deberían ser mucho más que eso. En realidad, deberían hacernos reflexionar, para ser más organizados y prever este tipo de situaciones en el futuro, para tratar de evitarlos o al menos, para saber qué hacer en caso de que ocurran y que, si la única posibilidad es parar la competencia, se haga de inmediato y no después de dos minutos.
Porque dos minutos para quién está deliberando al borde de la pileta o mirando desde la tribuna puede que no sea nada, pero para el que está en el agua nadando a su máxima potencia es una eternidad...

viernes, 18 de mayo de 2007

Faltan 34 días...

Faltan solo 34 días para un nuevo encuentro con el "efecto Montaña Rusa".
Fue una larga espera, pero por fín, alguien con conocimiento de causa publicó la confirmación de la fecha del Campeonato Nacional de Natación Masters.
Copio a continuación, el texto extraído del blog de Jorge Aguado (http://jorgeaguado.blogspot.com/)

18 mayo, 2007
Nacional de Masters. Fecha confirmada.
Nadadores Masters: les confirmo la fecha del Nacional tal cual la CADDA lo ha establecido.
Les copio mensaje recibido del Presidente de la Comisión de Masters Sr. Rubén Darío Bustos.
"Estimado Jorge:
Ante consultas sobre la fecha del Argentino Master, te confirmo que el mismo se llevará a cabo entre los días 21 y 24 de junio en el natatorio de La Inmaculada (Santa Fe). Es cierto que en un principio se barajó la fecha del 14 al 17 aprovechando el feriado largo, pero no prosperó por festejarse el domingo 17 el día del Padre. Asimismo y aprovechando esta ocasión, te cuento que está aprobada su realización en 4 días, de los cuales la segunda y tercer jornada se desdoblarán para efectuar por las mañanas las pruebas de 400 y 800 metros libre.La convocatoria oficial ya la envié a la CADDA para su aprobación y según tengo entendido ya fue girada a Santa Fe para que solamente agregue datos de las actividades internas y de hotelería. Ojalá la FESANA en breve remita la documentación a todas las Federaciones y que éstas a su vez informen a sus afiliadas y/o posibles interesados.Agradecido por el espacio y felicitándote por la calidad del sitio, te saludo afectuosamente.
Rubén Bustos"


El Nacional del año 2006 que se realizó en Paraná, lo viví desde mi casa a través de la página de la FEN y de Marea Roja. Hacía muy poco que me había incorporado al equipo y pude presenciar, en cada entrenamiento previo al Master, cómo los federados se preparaban con entusiasmo para el evento...
No entendía bien de qué se trataba, hasta que un día entré en la página de Federación Entrerriana de Natación (www.fen.org.ar) que era la organizadora del campeonato y leí con mucho asombro que se esperaba la asistencia de más de 600 nadadores de todo el país...
Saber que la pasión que yo sentía por la natación mobilizaba tanta gente, me emocionó.

Recuerdo que estuve a último minuto pensando en viajar como "hinchada" para alentar a mis compañeros, pero era fin de mes, no tenía un mango y además, no los conocía mucho todavía y no quería resultar pesada.
Recuerdo también, que con Juanita dejábamos mensajes a cada rato en la página de Marea Roja para que desde Paraná nos contaran cómo les estaba yendo; pero los chicos estaban a mil con las competencias, los nervios y el cansancio.
Volvieron agotados, pero con la emoción de haber vivido un evento inolvidable, algunos con medallas, otros con la confirmación de haber mejorado sus propias marcas y TODOS con el premio de haber compartido entre "amigos" un viaje, un torneo, una competencia, una ilusión, una hinchada, y una pasión : ¡Aguante Marea Roja!

Esta fue una de las fotos que, a mi gusto, dejó mejor plasmada la emoción, el entusiasmo y el orgullo de cada uno de los integrantes del equipo en su participación en el Campeonato Nacional de Natación Masters de Paraná 2006.
Esperemos que este año la foto sea más grande, con nuevos miembros y con los federados debutantes, pero que podamos mantener esas sonrisas y la alegría manifiesta en esos rostros, por saberse parte de un gran equipo!
Vamos Marea Roja!!! Santa Fé nos espera...



lunes, 14 de mayo de 2007

Oceans

Hold on to the thread
The currents will shift
Glide me towards...
You know something's left
And we're all allowed
To dream of the next

Oh, ohh the next, time we touch...
Oooh... Oooh...

You don't have to stray
Tho oceans away
Waves roll in my thoughts
Hold tight the ring...
The sea will rise...
Please stand by the shore...
Oh, oh, oh, I will be...
I will be there once more...

Oooh... Oooh...
Uh huh, oh yeah...

Pearl Jam (Ten - 1991)


Océanos

Manten el hilo
Las corrientes cambiarán
Deslizame hacia ellas
Tu sabes que algo se abandona
Y a todos se nos permite
Soñar con el próximo
El próximo momento que nos toquemos

No tienes que perderte
Dentro de los océanos
Olas giran en mis pensamientos
Sostén fuerte la anilla
El mar crecerá
Por favor espera en la orilla
Estaré allí otra vez más...

(a la derecha, en "Sopa de Letras Stereo...", pueden disfrutar de este tema)

viernes, 11 de mayo de 2007

Un año atrás...

Hace exactamente un año atrás, volvía al mundo de los torneos de Natación, con unos nervios terribles y la misma sensación que cuando dí mi examen final en la facultad.

La noche anterior al torneo habíamos celebrado la despedida de soltero de Pablo, nuestro entrenador. Después de dormir dos horitas, armé el bolso y partí hacia José Hernández para ver competir a mis compañeros federados. Fue una jornada larga y los logros del equipo fueron muchos. Una vez arriba del cubo de partida, cada uno se olvidaba del cansancio y ponía lo mejor de sí en la competencia. Yo los veía nadar y no lo podía creer.
Hasta ese momento me habían dicho que a mí me iba a ir muy bien y lo que yo veía en realidad, era que me iban a hacer pomada. La primer prueba de mujeres federadas eran los 400 combinados y si bien nadaron muy pocas yo las veía volar sobre el agua y de a poco me iba enterrando cada vez más en la silla con la intención de que me tragase la tierra y me ahorrara el bochorno.

Después, con las bromas de mis compañeros y con el paso de las horas me fui haciendo a la idea de que no había marcha atrás, que yo había tomado la decisión de participar y tenía que asumir la responsabilidad.

Terminó la competencia de los federados y los promocionales nos tiramos a ablandar. Recordé las tantas noches en que había soñado con volver a competir; eran sueños llenos de vitalidad, pero que al despertar me dejaban el sabor amargo de la irrealidad.

El 14 de mayo de 2006, en la Asociación José Hernandez, mi sueño se hacía realidad.

Pasadas las tres de la tarde y con esa mezcla de hambre, nervios y sueño, que suele ser como dinamita para el espíritu, empezaron las competencias...

Recuerdo el momento previo, esperando en la cabecera que llamaran a mi serie, preguntándole a Germán: ¿decime por qué estoy acá? ¿decime por qué la necesidad de sufrir así?, y él me respondió (por los nervios del momento no lo acuerdo exactamente) que nos gustaba nadar y en definitiva, competir era parte del show, por así decirlo. Yo me sonreí porque sentí que era como la montaña rusa, a la cual me encanta subir y me parece uno de los juegos más emocionantes que hay, pero de la cual me bajo llorando por el exceso de adrenalina (para los que me vieron alguna vez, es una imagen muy bizarra, porque me bajo llorando y me pongo en la fila para volver a subir).

Finalmente me llamaron. Volver a escuchar mi nombre por el parlante tuvo como un efecto anestésico y en ese instante los nervios pasaron a un segundo plano. En primer plano estaba la pileta, el agua y la voz que me ordenaba prepararme para la partida.
Finalmente llegó la señal, me tiré, nadé los 200 metros con la sensación de morir asfixiada en la siguiente brazada y viendo a mis compañeros alentarme desde el borde.
Y esa es otra sensación inolvidable: cuando alguien cree que vos lo podes hacer bien y te alienta para que lo consigas, para que no te sientas sola, para que sientas la fuerza de sus manos en cada brazada... Y en ese momento te das cuenta que la natación no es un deporte tan solitario como parece, y que cuando competís, no sos solo una nadadora, sino que nadás por y con todo tu equipo. Porque más allá de tu esfuerzo personal, te hace falta ese aliento para llegar a la meta; y porque el premio que obtenés adquiere mucho más valor cuando lo compartís con amigos.
En los 200 metros salí primera, y en los 50 pecho salí segunda. Las medallas fueron lindas, pero lo más lindo fue vivir nuevamente esa sensación (tan difícil de explicar), que implica volver a competir, siendo parte de un equipo... de un equipo maravilloso...

El Agua de la Vida Parte IV

El equipo de José

Cuando empecé la secundaria, en 1986, me tocó vivir una de las tantas reformas educativas que incluía entre las materias obligatorias, cursar (en contraturno) un taller por cuatrimestre. En el segundo cuatrimestre, el taller era de Natación (algo increíble para una escuela secundaria pública de Wilde).
No me olvido más de esos jueves, en que nos quedábamos a comer un sandwich a la salida del colegio y nos tomábamos todos juntos el colectivo hacia Bernal.
Las clases duraban una hora y los profesores se repartían como podían para enseñarle a los que no sabían ni flotar y para que los que sabíamos nadar no nos aburriéramos.
Una tarde, cuando me dirigía hacia el vestuario, me llamó el guardavidas y me preguntó dónde había nadado (de esta escena tuve un dejà vu en la primera charla con Pablito).
Nos pusimos a conversar y me terminó convenciendo de volver a nadar y a competir. El Guardavidas se llamaba José Savelli y tenía un equipo de natación en la Asociación Italiana de Ex-Combatientes de Bernal. Entrenaban entre 1000 y 1200 mts. por día y a partir de mi ingreso al equipo modificamos los entrenamientos en base a mis recuerdos de Independiente. Así pasamos a entrenar 3500 a 5000 mts. según el día y el equipo mejoró muchísimo. Logramos salir sub-campeones o terceros en casi todos los torneos. Competíamos para COTIN (Comisión Organizadora de Torneos Interclubes de Natación) que se manejaba como una Federación (ej. FENABA) pero mucho más organizado. Los principales equipos con los que competíamos eran el Club 12 de Octubre, la Cervecería de Quilmes , el Quilmes Atlético y el Quilmes Oeste. También estaba el club Los Andes de Lomas y el Wilde Sporting Club.
Recuerdo que en invierno teníamos torneo cada 15 días y a fin de año se corría el Torneo de Campeones, que incluía solo a los que habían alcanzado los seis mejores tiempos durante la temporada.
En medio de nuestra pasión por "El Equipo de José" el entrenador se peleó con el dueño del club, renunció y se fue a trabajar al "Juventud de Bernal". La mayoría de los nadadores nos fuimos con él. Y seguimos ganando.
En una ocasión (no me acuerdo el torneo) salimos campeones y nos ganamos una súper copa de esas que miden 1 metro y está exhibida en la vitrina del club. Qué emoción!
Yo volvía de cada torneo con un par de trofeos y no lo podía creer, porque no estaba acostumbrada, porque nunca había ganado nada, porque mi viejo me había inculcado el dicho: "lo importante no es ganar sino competir". Pero con José descubrí que ganar era hermoso, que la satisfacción de hacer algo bien y que te premien por eso era magnífica.

Recuerdo que cada tanto surgía alguna que otra chica muy buena que ganaba un par de competencias y que después, de golpe no la veíamos más. Al preguntar nos decían con tono solemne, que "se había federado".
Para todos, Federarse era algo así como estar más cerca del cielo; pero para mí, acorde al pesimismo típico de la adolescencia, había sido como estar más cerca del infierno y el verdadero paraíso era formar parte de un equipo de un club de barrio, dar mis primeras clases de natación, sumar trofeos a mi colección (que llegó a ser de 63 y ahora están tirados en una caja) y divertirme con lo que hacía.
Por desgracia no me quedaron fotos de esta época que duró hasta mis 17 años, edad en que la oscuridad se apoderó de mi corazón, me convertí en Dark y abandoné todo (otra vez...)
Una de las últimas competencias fue el "Torneo de Campeones" en donde salí Sub-campeona en 100 espalda, 200 libre y 200 combinados. Pero no me alconzó, porque mi visión de las cosas había cambiado, el mundo era más oscuro y todo podía ser peor. Mientras mis amigos decían que era re-grosa por obetener el segundo puesto, yo me sentía más "sub" que nunca, así que empecé a faltar a los entrenamientos, empecé a fumar (mi entrenador fumaba) y me alejé de la natación y del agua, por mucho tiempo...
José no fue un personaje muy significativo para mí, pero igual debo agradecerle la oportunidad de haber tenido mi primer trabajo, dando mis primeras clases de natación a niños de 3 a 10 añitos que me decían "seño", que me llenaban de amor y a los que pude transmitir un poquito de mi pasión por el agua. En ese aspecto, José fue mi primer jefe y les puedo asegurar que ese, fue el mejor trabajo que tuve en mi vida...

jueves, 10 de mayo de 2007

Rock en el Agua

Este es, para mí, uno de los mejores videos del rock nacional.
Del álbum "Infame" de Babasónicos (2003), el tema es "Putita". La letra no dice mucho, pero el video lo dice todo: "...el camino a la fama no significa nada
si no hay una misión..."

martes, 8 de mayo de 2007

En Los Sueños


Agua que baña con aguas frescas
las costas que te acompañan.
Soy agua que fue y hoy está seca
para llover mañana.
Raíz profunda, no sabés del miedo
estás siempre acompañada.

Hoy te vi en los sueños
Hoy te vi en los sueños…

Perdí la noción del tiempo
al caer de boca en tu boca.
Viaje a favor y en contra del viento
feliz o con el alma rota

Hoy te vi en los sueños
Hoy te vi en los sueños…

Dormí, desperté cayendo,
desperté entre sábanas rotas
Viaje a favor y en contra del viento
feliz o con el alma rota
o con el alma rota

Hoy te vi en los sueños
Hoy te vi en los sueños…

En los sueños…

Catupecu Machu ("El Número Imperfecto"-2004)

lunes, 7 de mayo de 2007

Luchar hasta el final...


“En las competencias de más alto nivel entra en la natación un nuevo factor: el dolor. Aprende uno a conocer el dolor en las prácticas y ha de experimentarlo en todas las competiciones. El suplicio comienza al acercarse uno al límite de su resistencia: va produciéndose gradualmente, afectando el estómago primero; los brazos se sienten pesados; las piernas se ponen tensas… en los muslos, en las rodillas.

Se hunde uno más en el agua, como si alguien lo estuviese empujando por la espalda. Se le dificulta mantenerse a flote. La percepción cambia. Los sonidos de la piscina se combinan hasta convertirse en un rugido constante en los oídos. El agua toma un matiz rosado. Se siente como si fuera a desprendérsele a uno el estómago; cada patada duele lo indecible, y de pronto se oye un destemplado grito interior.

Entonces hay que elegir: o desistir u obligarse uno a luchar hasta el final, a sabiendas de que el tormento será agudísimo. Precisamente en ese momento se separan los grandes competidores de los demás, pues son los últimos pocos metros los que cuentan. La mayoría de los nadadores desiste. Si se logra traspasar la barrera del dolor, llegando al verdadero martirio, se es campeón.”

Don Schollander ("Deep Water")
Fuente: Andarivel 4

jueves, 3 de mayo de 2007

El agua de la Vida Parte III

Rojo Pasión...

A fines del verano de 1980 y teniendo 7 años fui promovida de la escuelita de Independiente, al equipo de Natación. Me despedí del profesor Vazquez y pasé a entrenar con el profesor Eduardo Corcchio, "Corcho" para todo el mundo. Era un tipo re-simpático y super bueno. Corcho manejaba el equipo de infantiles (hasta los 13 años) y debíamos ser más de 20.
Entrenábamos de lunes a viernes de 16 a 18:30 o algo así.
Nos hacía trabajar mucho pero no nos perdía de vista ni un minuto, recorriendo el lateral de la pileta de un lado a otro, una y otra vez, corrigiéndonos la técnica de nado.
Nadé con Corcho seis años, durante los cuales pasé por todo tipo de entrenamientos, que por desgracia no recuerdo con exactitud.
En invierno entrenábamos en la pileta cubierta (fotos) de la sede social y en verano hacíamos un doble turno, de 8 a 11 en la pileta descubierta (hacía mucho frío) y por la tarde en la sede. Tengo recuerdos de haber llegado a nadar entre 8.000 y 12.000 mts en un día (quizás era más, pero ahora me parece demasiado)
Los entrenamientos los empezábamos con una rutina de ejercicios fuera del agua (abdominales, flexiones, sentadillas, etc), trabajábamos brazos con extensores y hacíamos complementos de pesas (unas pesas caseras hechas con un hierro y dos latas de aceite de auto, rellenas con cemento) trabajando biceps, triceps y cuádriceps...

Después aflojábamos un poco los brazos y nos tirábamos a la pileta para entrar en calor nadando sin parar de 40 minutos a 1 hora. Después hacíamos algún trabajo fuerte (pasadas de 100) y siempre completábamos con patada o con manoplas y pull boy o con driles (ejercicios de técnica). Me acuerdo que uno de los driles que hacíamos era respirar 8 x 1 (y podía!!!)

Al tiempo de estar en el equipo me federaron, y esto no implicaba solo una formalidad, sino que a partir de ese momento el club se hacía cargo de los gastos de federación, tenía acceso para usar todas las instalaciones de forma gratuita y me entregaban el uniforme para llevar a los torneos y desfiles...

Lo cierto es que nunca fui de los mejores, formaba parte del equipo B del club y nunca gané nada en los 6 años, pero Corcho siempre tenía algo para rescatar, ya sea que había mejorado el estilo, que había bajado el tiempo. A veces me decía que yo era fondista y que iba a andar bien en los 1500, pero nunca llegué a nadarlos. (ahora que lo pienso era igualito a Pablo!)

A los 13 años al pasar al equipo de juveniles, empecé a entrenar con Alberto Santiago (un ser muy odiado por unos cuantos) y en poco tiempo me hizo sentir que no servía para nada, hasta que un día volví llorando a mi casa y dije que no iba a ir más a Independiente. Y así fue...

En las fotos estamos haciendo ejercicios en los días de cambio de temporada en que las piletas cerraban. De espaldas están Corcho, Mónica Mereditz (derecha, la pechista del equipo) y Edith Arrazpide (a la izquierda - quien obtuvo muchos títulos, principalmente en mariposa, llegó a nadar en las Olimpíadas de Barcelona 92 y actualmente es entrenadora del equipo de Nadadores Discapacitados de Independiente). De frente con remera roja y pantalón marrón, estoy yo, haciendo lo que podía... :P
En fin, acá termina otra parte de mi historia, y no me quiero despedir, sin decir: Gracias Corcho! por todo lo que me enseñaste, por todas las palabras de aliento y de consuelo, y por haber sido un gran tipo, un excelente ser humano y un gran entrenador...