lunes, 7 de julio de 2008

Naufragar...

Es tan chiflado y obnubilado
que puede ser...
Tan caprichoso y tan sonado
que puede ser...

Bombas de aquí para allá
Puede ser, es irreal
Ya no estás solo
Estamos todos en naufragar

Son seis minutos
y nuestra "mami" va a contestar
"Mami" elimina el error
de que vos sos capaz

Rayos de aquí para allá
Puede ser, es irreal.

Canción para naufragios
Patrico Rey y sus Redonditos de Ricota - Oktubre (1986)

Un triple mensaje:

Al Rey Patricio por una nueva celebración, a la cual no pude asistir, pero en la que anticipó mi regalo de cumpleaños: "Próximo show - 27 de septiembre en San Luis"

A mi naufrago amigo: "ya no estás solo..."

A mi misma: quizás naufragar no sea darse por vencido, sino dejar de 'aguantar' los golpes de la tormenta y buscar alguna playa en espera de un mar más calmo... además, para naufragar se necesita navegar primero y eso es mucho mejor que conformarse con la seguridad de tierra firme...

"[...] Mirando en torno a la inmensa extensión de ébano líquido sobre la cual éramos así llevados, advertí que nuestra embarcación no era el único objeto comprendido en el abrazo del remolino. Tanto por encima como por debajo de nosotros se veían fragmentos de embarcaciones, grandes pedazos de maderamen de construcción y troncos de árboles, así como otras cosas más pequeñas, tales como muebles, cajones rotos, barriles y duelas. He aludido ya a la curiosidad anormal que había reemplazado en mí el terror del comienzo. A medida que me iba acercando a mi horrible destino parecía como si esa curiosidad fuera en aumento. Comencé a observar con extraño interés los numerosos objetos que flotaban cerca de nosotros. Debo de haber estado bajo los efectos del delirio, porque hasta busqué diversión en el hecho de calcular sus respectivas velocidades en el descenso hacia la espuma del fondo. 'Ese abeto -me oí decir en un momento dado- será el que ahora se precipite hacia abajo y desaparezca'; y un momento después me quedé decepcionado al ver que los restos de un navío mercante holandés se le adelantaban y caían antes. Al final, después de haber hecho numerosas conjeturas de esta naturaleza, y haber errado todas, ocurrió que el hecho mismo de equivocarme invariablemente me indujo a una nueva reflexión, y entonces me eché a temblar como antes, y una vez más latió pesadamente mi corazón. [...]"

Descenso al Maestrón - Edgar Allan Poe

No hay comentarios.: