martes, 18 de noviembre de 2008

Because...

Hace un año alguien "anónimo" me dejaba este comentario en una de mis entradas:

El esfuerzo orientado a un objetivo y la inteligencia que ordena y nos diferencia de la fuerza bruta de los animales...
El contacto con el "agua viva" nos serena y predispone a ideas nuevas y creadoras...
un cambio de actitud nos transforma a nosotros y a nuestra proximidad...
que mas pedir, no? es el comienzo del cambio...


Y realmente fue el comienzao del cambio...
A un año compruebo (quizás en carne viva) que verdaderamente lo que nos transforma, transforma también a nuestra proximidad.
Qué más pedir?
Que no me sigan los fantasmas.
Fantasmas de los vivos que han pasado y que dejan su marca como un tatuaje en el alma. Fantasmas de charlas y voces, de música y de abrazos.
Fantasmas como aguas vivas que me queman con su veneno con apenas rozarme.
Fantasmas de preguntas sin respuesta.
Recuerdo que este espacio comenzó con un Why?
Why? que me persigue desde hace 20 años, a pesar de toda el agua que pasó bajo el puente.
Y eso que ni el puente, ni el río, ni yo somos los mismos.
Pero la pregunta sí es la misma. Por qué?
¿Por qué los sueños que son como un amanecer terminan en la más oscura noche?
¿Por qué aquel con quien hablé noches enteras no puede decir ni una palabra?
¿Por qué sigo esperando que lo inexplicable tenga una explicación?
¿Por qué mi neurosis se encapricha con ciertas cosas si mi mente ya entendió el mecanismo de las palabras y las preguntas que solo me llevan a encadenarme?
¿Por qué la maldita culpa aparece aún sabiéndome inocente?
¿Por qué revivo una otra y otra vez todos los mágicos momentos que dejé pasar tratando de aferrarme y revertirlos?
Maldito inconsciente, y maldito deseo. Malditos Freud y Lacan que no dejan de analizar mis lágrimas...
Lágrimas que podrían formar un lago, como el que alguna vez soñé visitar...
Dos Letras y un mismo tema:
El "zumba" se colgó del bondi a Finisterre rajando del amor detrás de un beso nuevo. Con lo que cuesta armar un full, armar algún puto full y jugarlo en este paño, Dios!
Gualicho de olvidar apretado en las manos. Las despedidas son de esos dolores dulces. Con lo que cuesta armar un full, armar algún puto full, y jugarlo en este paño, Dios!
Caldos de venus que son como agua bendita y un par de rounds de amor, con la tele encendida. Con lo que cuesta armar un full, armar algún puto full y jugarlo en este paño, Dios!
Puede ser chaparrón pero también tormenta. No quiero verte más! será así en mi ceguera?
Con lo que cuesta armar un full, armar algún puto full, y jugarlo en este paño, Dios!
Gualicho de olvidar!.


Un día después (después de vos) crucé los dedos. La barca pasó y el río quedó, al fin, quieto.
Solo un tiempo fue que ayudo a pasar un buen rato. Un castillo de naipes que calló y palabras baratas. En el aire entre los dos, brilló una copa rota, mala suerte, mi palma dió destino obscuro. Un dulce licor del romero fue la mala idea loca, te vas a enterar por esta canción para el carioca! No sueño más con vos, ya cayó otra flor del cielo; te voy a robar esta canción de amor y de consuelo. A la suave luz de la luna vi tu espalda, hay un lugar allí para mis huellas y un lunar nocturno. Apostamos mal! Serás más felíz vagabundeando; muy poco amable fui, nada nuevo ví en tus ojos...


Gualicho y La pequeña novia del carioca
Los Redonditos de Ricota.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Tu amiga fiel

Yo soy tu amigo fiel. Yo soy tu amigo fiel
Y si un día tú te encuentras
Lejos, muy lejos de tu lindo hogar
Cierra los ojos y recuerda que
Pues, yo soy tu amigo fiel
Sí, yo soy tu amigo fiel
Yo soy tu amigo fiel. Yo soy tu amigo fiel
Tienes problemas, yo también
No hay nada que yo no pueda hacer por ti
Y estando juntos, todo marcha bien
Pues, yo soy tu amigo fiel (ya verás)
Sí, yo soy tu amigo fiel
Tal vez hay seres más inteligentes que yo
Más fuertes y grandes también, tal vez
Ninguno de ellos te querrá como yo a ti
Mi fiel amigo
Nuestra gran amistad (amistad)
El tiempo no borrará (no lo hará)
Ya lo verás, no terminará
Yo soy tu amigo fiel
Cierra los ojos y recuerda que
Sí, yo soy tu amigo fiel
Ya lo verás, siempre, sí señor
Yo soy tu amigo fiel (ya verás)
Yo soy tu amigo fiel (de verdad)
Yo soy tu amigo fiel
(letra del tema central de Toy Story - Disney)

Esta semana pasó por Argentina mi amiga y hermana del alma que vive en Brest, un pueblito de la costa Norte de Francia y a quién no veía desde hace casi 10 años. Nos conocemos hace nada menos que 32 años y a más d2 10.000 km de distancia, somos incondicionales aunque ni nos hablemos. Eso es amistad, saber que el otro está ahí, a pesar de todo y gracias a todo. Ya sea que pasen días, meses o años. Así pasen 10 años sin noticias, toda la información se recupera en el primer abrazo. Marian es un ser especial y yo soy su amiga fiel...

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Muelles y Destinos

Como en la foto, en la vida hay muelles que no te llevan a ningún lugar. Te podés mantener aferrada a sus tablas desgastadas por mareas y crecientes, sin obtener más que la casual visita de alguna que otra gaviota extraviada. Y sin embargo permaneces y te aferras aún más, con la esperanza que algún príncipe llegue con su velero a rescatarte. Y en esa espera no te das cuenta que vos no sos una princesa, son solo una sobreviviente de algún naufragio de la vida y que cuando el príncipe pase, ni siquiera va a notar tu presencia.
Pero seguís aferrada porque lo último que se pierde es la esperanza, la ilusión de compartir ese muelle que ya crees tuyo, con alguien más.
Hasta que un día te das cuenta que la única esperanza sería soltarte del muelle, zambullirte en el agua y comenzar a nadar.
Entonces, una noche en que la luna llena no te deja dormir, te convencés que el agua es tu única salida y a la mañana siguiente te tirás y comenzás a nadar.
La primera sensación es puro placer, es pura libertad, no sentís más la rigidez de las maderas del muelle que te clavaban cada día sus astillas; ahora en cambio, el agua te acaricia y te mece, te refresca y te moviliza.
El día transcurre en una sucesión continua de brazadas que te adormecen y es por la tarde cuando te das cuenta, que, al parecer, pronto caerá noche y ya no tenés muelle donde descansar. Y pasan los veleros con príncipes y princesas que te miran extrañados y se burlan de tu pobreza, tu cansancio y tu desventura...
Y la noche está por caer con su manto de oscuridad y ya estás demasiado cansada para seguir nadando o para volver a tu muelle perdido en el horizonte.
Y mientras tu mente se debate entre lo que hiciste, lo que no hiciste o lo que deberías haber hecho, tu alma percibe que tu única posibilidad es entregarte a las aguas y tu corazón siente que es agua. Así que finalmente, mientras Venus asoma con sus brillos de Lucero y la Cruz del Sur marca tu rumbo, soltás las últimas amarras de tu cuerpo y te dejás llevar...