Banderas en tu Corazón

Si alguien me hubiera dicho que la frase: "Todo vuelve en la vida" podía tener su faceta positiva, yo le hubiera discutido que no; que esa frase solo se usa para decirle a otro con enojo que "el que las hace las paga".

Pero ayer alguien, me demostró lo contrario. Me demostró que lo que uno hace de corazón también vuelve y en su momento justo.

Ayer, a la salida de nuestro entrenamiento en la pileta de la Facultad de Derecho, una de los "Psiconautas" (1º equipo de Natación de la Facultad de Psicología de la U.B.A.) me hizo entrega de la Bandera del Equipo, para que la usemos con orgullo en nuestras próximas competencias.

Hace un año y medio atrás, yo había hecho lo mismo, con el único propósito de demostrar mi orgullo por pertenecer y como una forma de agradecimiento por las pequeñas de cada día.

Ahora veo esa bandera en fotos, mostrando la misma pasión, el mismo orgullo y el mismo amor, y aunque yo ya no esté cerca, sé que en ese paño rojo está parte de mi corazón.

Hoy, cada vez que paso por el sillón donde apoyé la nueva bandera, no paro de pensar y de sentir, que la vida siempre te da sorpresas, aunque creas que ya no queda nada de que sorprenderte.

No hay palabras que describan la emoción, la alegría y el cariño que sentí al tomar este nuevo paño negro en mis manos.

Y simplemente lo único que puedo decir es: GRACIAS!!!

Banderas en tu corazón, yo quiero verlas!

ondeando, luzca el sol o no

Banderas rojas! Banderas negras!

de lienzo blanco en tu corazón.

Perfume al filo del dolor, así, invisible

licor venéreo del amor

que está en las pieles, sedas de sedas

que guarda nombres en tu corazón.

Son pájaros de la noche que oímos cantar y nunca vemos.

Cuando el granizo golpeó, la campana sonó,

despertó sus tristezas atronando sus nidos.

Esperando allí nomás, en el camino,

la bella señora está desencarnada.

Cuando la noche es más oscura se viene el día en tu corazón.

Estás cambiando más que yo. Yira! Yira! Yira!

Asusta un poco verte así. Yira! Yira! Yira!

Cuanto más alto trepa el monito

(así es la vida) el culo más se le ve.

Yo sé que no puedo darte

algo más que un par de promesas...

ticks de la revolución implacable rocanrol

y un par de sienes ardientes que son todo el tesoro.

Tan veloces son! Como borrones (así, veloces)

hundiendo el acelerador, atragantados por los licores,

soplando brasas en tu corazón.

Vas a robarle el gorro al diablo, así,

adorándolo como quiere él, engañándolo.

Sin tus banderas sedas de sedas

que guardan nombres en tu corazón.

Este asunto está ahora

y para siempre en tus manos, nene

Por primera vez vas a robar algo más que puta guita

Cuando la noche es más oscura se viene el día en tu corazón.

Sin ese diablo que mea en todas partes

y en ningún lado hace espuma.

Juguetes perdidos - Patricio Rey y Sus Redonditos de Ricota - Luzbelito 1996