Día Mundial del Agua

El sábado 22 de marzo se celebró el Día Mundial del Agua, en el contexto del Año Internacional del Saneamiento proclamado por la ONU para este 2008.

Parece un contrasentido saber que tres cuartas partes del planeta en que vivimos están cubiertas de agua, pero sólo una ínfima cantidad de ésta es dulce, potable y de fácil acceso, situación que se convierte en el desafío más importante para la humanidad en el siglo XXI.

Según declara el director general de la UNESCO, Koichiro Matsuura, "el acceso a agua potable y a servicios básicos de saneamiento es un requisito sine qua non para alcanzar los objetivos del Desarrollo del Milenio relativos a la pobreza, la salud, el género y la sostenibilidad medioambiente. La mejora del saneamiento tendrá repercusiones positivas tanto en la salud humana como en el medio ambiente". Entre los beneficios de la higienización señala la considerable disminución de las enfermedades transmitidas por el agua y, por consiguiente, la prevención del fallecimiento prematuro de millones de personas, así como el incremento del desarrollo humano, la dignidad, la seguridad, en especial de las mujeres y las niñas y el avance de la igualdad de género."En la actualidad hay una necesidad perentoria de abordar la cuestión del saneamiento de manera sostenible, con la participación de todos los interesados y de los gobiernos, las comunidades locales, las familias y los inversores", sostiene.

Es importante tener en cuenta que mientras unos la dejan correr, una alta cifra de personas carecen de las cantidades mínimas para satisfacer sus necesidades básicas. La escasez no se debe, por tanto, sólo a las condiciones naturales de determinadas regiones, sino que en ella inciden el crecimiento demográfico, el despilfarro y la contaminación. Como en otros aspectos derivados del desarrollo y la globalización, también en lo concerniente al agua existe un marcado desequilibrio entre los países ricos y pobres. En estados Unidos, por sólo citar un ejemplo, el consumo medio de este líquido es de 2 mil metros cúbicos por habitantes, mientras en el Níger es de unos escasos 41. No resulta infundada entonces la percepción de destacados analistas de que el tema del agua constituirá la principal causa de conflictos en el futuro.

El agua potable, debidamente tratada y descontaminada, es un bien que necesitamos todos para nuestras necesidades higiénicas y domésticas. Sin ella nadie sería capaz de llevar una vida sana y productiva. Es por eso que este Día Mundial del Agua debe propiciarnos el análisis profundo sobre como hacer perdurable un recurso que es fuente de vida y salud y al cual tenemos derecho todos cuantos vivimos en el planeta azul.

Fuente: Periódico "5 de Septiembre"